La importancia de hurgar en el cuerpo, de conocerlo y desentrañarlo es tal que normalmente nos olvidamos por completo de ella, más en estos tiempos modernos. Frecuentemente las personas van al médico a que éste les diga qué está mal y así poder seguir las instrucciones pertinentes, aunado al hecho de haber llegado con alguien que aparentemente sí los escucha y entiende, ya sea pediatra, psicólogo, etc. No obstante, ¿porqué no primero consultarle al médico más cercano que se tiene, uno mismo? La gente olvida que hay un ser que los entiende y que jamás los abandonará ya que es física, mental y espiritualmente imposible que tal cosa ocurra. Ese ser es cada quien para cada quien. En mi caso soy yo, en tu caso sos vos mismo o vos misma. No se debe dejar de lado el escuchar al cuerpo propio (por ahora dejaré de lado el aspecto mental o espiritual, aunque influyen en él directamente).
El cuerpo habla por sí mismo. Cuando se tenga un problema físico, primero se ha de reflexionar sobre de dónde proviene la molestia y ver qué puede estar relacionado con el malestar. Si duele el pecho y la cabeza, quizás el problema esté en el cuello o la nuca; si duele el pie, quizás es porque cada mañana te despiertas apoyando la pierna de una manera inapropiada; si roncas, quizás no has practicado bien el respirar profundamente. El cuerpo es uno sólo y lo que suceda en la punta de la uña del dedo gordo del pie derecho de alguna forma toca la integridad de la punta del pelo más opuesto al pie...
Hay especialistas para cada cosa, pero primero consulta al médico más capacitado e inconsciente de sus facultades medicinales que existe: tú mismo.
Pablofago
"Este post no es nada sin los demás."
El cuerpo habla por sí mismo. Cuando se tenga un problema físico, primero se ha de reflexionar sobre de dónde proviene la molestia y ver qué puede estar relacionado con el malestar. Si duele el pecho y la cabeza, quizás el problema esté en el cuello o la nuca; si duele el pie, quizás es porque cada mañana te despiertas apoyando la pierna de una manera inapropiada; si roncas, quizás no has practicado bien el respirar profundamente. El cuerpo es uno sólo y lo que suceda en la punta de la uña del dedo gordo del pie derecho de alguna forma toca la integridad de la punta del pelo más opuesto al pie...
Hay especialistas para cada cosa, pero primero consulta al médico más capacitado e inconsciente de sus facultades medicinales que existe: tú mismo.
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